Liderando impulsando a otros líderes

La semana pasada vi por primera vez la película El Señor de los Anillos, La Comunidad del Anillo. Si, habéis leído bien, la primera vez! Aunque parezca mentira no la había visto aún. Algunas de las escenas me hicieron pensar mucho en el liderazgo creativo y transformador que estamos impulsando en las organizaciones pioneras.

Gandalf y Frodo

Gandalf es un personaje clave. Es, junto a Merlin, considerado el prototipo de mago en la ficción occidental. Este personaje ficticio del universo de J.R.R. Tolkien, es para mi un modelo de líder (creo que el liderazgo es un arte y tiene algo de magia). Lo es especialmente en el ámbito del líder como coach. Un líder que impulsa y hace crecer a los demás.

Frodo, es el protagonista en esta película. Hereda el anillo mágico y es el encargado de llevarlo en secreto a Rivendell, junto a su amigo Sam y sus primos Pippin y Merry.

La relación entre Gandalf y Frodo, desvela algunos de los factores clave que brillan en los líderes que desarrollan líderes.

El primero es la capacidad de ver y desarrollar aquellos talentos que no son visibles. Al inicio de la película parece que Frodo no tiene ni el coraje, ni la valentía, ni seguramente las cualidades físicas para emprender con éxito la arriesgada misión. Creo que Gandalf sabe ver y trabajar con aquellas cualidades y talentos únicos que en el presente son invisibles. Muchos directivos gestionan excelentemente lo visible, pero son incapaces de mirar y percibir las corrientes profundas que solo existen para aquellos capaces de ver más allá de lo obvio. Esto significa escuchar en profundidad. Saber captar lo sutil. En coaching lo conectamos con la inteligencia intuitiva. Esto me hace recordar el libro del Principito, de Antonie de Saint-Exupéry. De la lectura de este magnífico cuento poético, la idea que a mi se me grabó en la memoria es «lo importante es lo invisible». 

La segunda cualidad es la sabiduría para elegir la posición de liderazgo que mejor servirá a los demás y a la misión encomendada (te recomiendo consultes la entrada del Liderazgo Dimensional de junio de este año).

Gandalf ejerce el liderazgo desde el frente y se posiciona de forma clara cuando la situación lo requiere. En otras cede la posición de liderazgo des del frente, para empujar a otros a que lideren, descubran su poder y conecten con su grandeza. Gandalf se mueve con sabiduría en las distintas dimensiones del liderazgo. No está apegado a una posición determinada. Sutilmente muestra a Frodo como el liderazgo se puede ejercer desde múltiples dimensiones.

Saber abstraerse de las situaciones emocionalmente intensas y tomar una perspectiva amplia no es nada fácil en la vorágine en la que viven muchos líderes. Ver más allá del interés y el beneficio para uno mismo no es muy común. Esto nos lleva a una tercera cualidad, la flexibilidad. Ser flexible y ágil para determinar cuál va ser la mejor postura, decisión y palabra que contribuya al bien de la Misión. ¿Desde dónde voy a realizar la mejor aportación? Esto es posible cuando el ego está «domado», cuando el líder se conoce bien y se gestiona. Cuando estamos enfocados en algo trascendente, que va más allá de nosotros.

La inteligencia emocional del líder es crucial, como Daniel Goleman y Richard Boyaztis siguen demostrando en sus investigaciones.

Gandalf está preparando conscientemente a Frodo, situación a situación, palabra a palabra para que pueda gestionarse y seguir siendo líder a pesar de las complicadas situaciones que va a afrontar en su viaje.

paso caradhras

Un ejemplo claro en la película es el paso de Caradhras. Gandalf ha asumido el liderazgo desde el frente en la hermandad del anillo y dirige la expedición hacia el sur. En este paso de montaña las condiciones climatológicas son extremadamente adversas. En ese momento donde la vida de todos ellos está en juego, cada uno de los miembros de la expedición proponen un ruta para salvarse. Los únicos que no proponen una opción son los Hobbit (Frodo, Sam, Pippi y Merry). Es un momento de tensión y confusión, y después de pensarlo y dejar sentir las opciones en su interior, Gandalf dice al grupo. «Qué el portador del anillo decida!». Frodo se sorprende, mira a su amigo Sam…Finalmente Gandalf se dirige al Hobbit «Frodo?».

«Atravesaremos las minas!» responde Frodo. Solo Gandalf sabe lo que se van a encontrar. Confía en Frodo incluso cuando quizás Frodo no confía en si mismo. Estro abre una nueva dimensión en Frodo y en el grupo expedicionario.

Gandalf está liderando desde el futuro

Quizás no es su opción preferida, pero se pone a disposición del grupo por el éxito de la Misión. Creo que esta agilidad queda muy patente en la película y es difícil de ver en las organizaciones que han tenido éxito a pesar de vivir en una cultura de liderazgo orientada al status, el control, el cortoplacismo y la jerarquía.

La pregunta es ¿cuál es el coste de oportunidad para estas Compañías? Si solo nos fijamos en el rendimiento económico no percibimos lo que nos estamos permitiendo que ocurra con la rigidez y la orientación al estatus.

Confianza es la cuarta cualidad que vi en Gandalf y que veo incrustada en el carácter de los líderes efectivos con los que tengo el privilegio de trabajar. Pablo Tovar escribía la semana pasada en su blog sobre el éxito y mencionaba al gran John Wooden, el mejor entrenador de todos los tiempos. Una frase suya me viene a la mente ahora.

 «It is better to trust and to be disappointed occasionally than to distrust and be miserable all time». 

La traducción vendría a decir que es mejor confiar y decepcionarse de vez en cuando que desconfiar y ser miserable permanentemente. La confianza en los demás y en la vida es para mi la cualidad más importante. Permite vivir mejor, disfrutar más del presente y tener la posibilidad de abrazar y crear desde todo lo que aparece. Nos pone en una posición de mayor seguridad en nosotros. Creamos entorno a nosotros y aquellos que nos acompañan un espacio de abundancia.

Es un multiplicador de posibilidades. Gandalf confía en Frodo, y sabe que tenga éxito o no, todo lo que pase servirá a todos. Aprenderán de todo y las circunstancias que vayan encontrando serán una oportunidad para ponerse en juego y realizar su máxima contribución.

Si eres un líder y deseas hacer tu mejor contribución a las personas que encuentres en tu camino, recuerda estas cuatro cualidades positivas: Capacidad de ver lo invisible, Sabiduría, Flexibilidad y Confianza.

Ser un Gandalf para otros líderes está a tu alcance. Que tengas una buena semana!

2 Comments

  • Chandra

    3rd noviembre 2015 at 10:29

    Como deberían de aprender muchos de este tema. Sin embargo no parece o habitual. Solo hace una semana escuche de un directivo que «solo confío en aquellos que me lo han demostrado».
    * Hay quien lidera y crea lideres
    * Hay quien crea ayudantes que para salvar el puesto de trabajo y la confianza de sus jefes sean meras extensiones de estos.
    Desgraciadamente la segunda situación la he vivido y el resultado no pudo ser más nefasto.

    ¿que opción facilita la creatividad, el dinamismo en definitiva el crecimiento empresarial y personal? ¿que opción aglomera la implicación personal con el desarrollo de lo común?
    Solo un equipo liderado es capaz de batir todos los records a su alcance.
    Los equipos extorsionados solo tienenden a disgregarse, a pensar en el bien propio en vez de el común y finalmente a huir de ese entorno agresivo y tóxico.

    La opción fomentar el miedo a perder el puesto de trabajo por satisfacer los intereses personales del que se cree lider solo lleva a la inanición. A la muerte por falta de eficacia y miedo a la toma de decisiones fundamentales.

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    • Daniel Poch

      16th noviembre 2015 at 10:45

      Hola Chandra. Gracias por tu comentario.
      Tienes razón que existen líderes que están a merced de su ego. No son capaces de ver más allá y no se dan cuenta de su impacto.
      La responsabilidad por el impacto que generas es fundamental. Para mi, la opción de facilitar el desarrollo y crecimiento de los demás es la que genera más satisfacción y plenitud en las personas. Incluso a ti mismo. Al menos es mi caso. Creo que estos directivos tóxicos no conocen los beneficios de vivir desapegados de su ego. No saben lo que les podría reportar estar al SERVICIO de los demás. En esta labor estamos, facilitando este cambio de perspectiva. El liderazgo de servicio te hace más feliz. Buena semana!

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