Una de las situaciones más retadoras para un líder es la resolución de conflictos. En situaciones de alta carga emocional e intereses contrapuestos el riesgo de perder la serenidad y actuar de forma ineficaz es muy elevado.
Ante una situación de conflicto en tu equipo:
- Define unas reglas de base (ground rules) en el equipo para que todos sepan de antemano como actuar eficazmente ante el conflicto. Estas reglas o código de conducta ante el desacuerdo suele incluir: Escuchar con respeto, no quedarse en las posiciones, si no buscar los intereses comunes detrás de las posturas enfrentadas. Una de los acuerdos que más he visto ayudan a los equipos es el juzgar la intención del que habla, no la acción. Esto resta juicio entre las personas, abre posturas y reduce la defensividad. Hace que las personas sean más compasivas y empáticas, ya que las intenciones suelen ser muchas veces buenas; lo que ocurre es que los seres humanos donde no somos tan pulcros es el el «cómo».
- Ofrece al equipo dos opciones, o afrontarlo y resolverlo, o bien, «soltarlo». O lo olvidamos y lo soltamos, o si esto no es posible, lo afrontamos y lo resolvemos. Las posturas intermedias no suelen ayudar. Muchas veces no somos capaces de hablar del mismo con autenticidad y valentía. Esta presente en la equipo, es un gran elefante que está afectando la dinámica del equipo pero no hablamos de ello. El líder del equipo debe exponerlo y dejar que el equipo elija. Si no podemos olvidar y perdonar, entonces debemos resolverlo.
- Poner los temas conflictivos en la mesa lo antes posible. No dejes pasar el tiempo. El tiempo hace solidificar y magnificar los conflictos en un equipo. Afrontarlo lo antes posible es crucial. Chequea si estás con la calma, serenidad y energía para hablar de ello con el equipo. Busca el mejor momento del equipo. Si el contexto está listo, tres, dos uno…Go! Muchas veces el equipo y el contexto están listo pero somos nosotros los que nos excusamos diciéndonos a nosotros mismos que son los demás los que no están listos. En el libro Los Cuatro Acuerdos de Miguel Ruiz, el cuarto acuerdo es «Hacer siempre el máximo». Es una forma eficaz de liberar al equipo y a ti mismo de un a conflicto que con el paso del tiempo pesa más e intoxica la dinámica.
- No presionar para que baje el nivel de energía en la conversación. Muchas veces los líderes deseamos «enfriar» el ambiente. Nos incomoda la tensión y la viveza en la discusión. Como nos da miedo el conflicto, no dejamos que salgan las emociones intensas y enfriamos y atemperamos cuando lo que hace falta es que se ventilen todos los tóxicos. Para poder hacerlo hemos de prepararnos y ampliar nuestro repertorio como líderes. Quedarse en estas situaciones es fundamental. Preparar a los miembros del equipo para que se queden y no rehuyan conversaciones vivas es clave.
- Para que podamos mantener la comunicación abierta en momentos de tensión elevada, no tomarse nada de forma personal es crucial. También es el segundo acuerdo del libro de Miguel Ruiz mencionado antes.
- El espacio físico en el que se resuelve el conflicto es un factor que no se suele tener en cuenta y puede ser muy relevante. Si las personas en conflicto se sitúan unas frente a las otras la dinámica de argumentación, contra argumentación se suele hacer de forma confrontacional y excluyente. Situar el tema en una pizarra o flipchart y tratar de resolverlo en circulo, juntos frente al tema nos ayuda a no personificarlo y a trabajar en una dinámica de equipo frente al tema a resolver.
Espero que estas sencillas pero poderosas ideas te ayuden a vivir mejor los próximos conflictos. El conflicto, bien conducido es una situación que comporta crecimiento, evolución y madurez en un equipo. El contraste y la discrepancia puede enriquecer al equipo. El discutir sanamente despierta la creatividad y la innovación. Finalmente, lo más importante es que desarrolla la complejidad e amplia perspectivas del equipo y nos hace ser más sabios y decidir con mayor eficacia.
5 Comments
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1st diciembre 2015 at 17:01Carmen Navarro
1st diciembre 2015 at 20:37Como siempre , un magnífico post. Una píldora para reflexionar y hacer consciente aquello que, en ocasiones, no nos atrevemos a afrontar. Gracias Dani!!!!
Daniel Poch
3rd diciembre 2015 at 21:19Gracias Carme! tus comentarios siempre animan a seguir escribiendo y compartiendo. Me alegro que te sea de utilidad y active neuronas y reflexión.
Un abrazo fuerte.
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21st diciembre 2015 at 19:26Pingback:
29th mayo 2017 at 16:07